Nos encontramos con André en Figueres (Girona-España) una típica fría tarde otoñal europea a inicios de noviembre. El viento molesta lo justo como para que desistamos de realizar esta entrevista al aire libre y nos refugiamos en la sala de repasos que el grupo musical andino “Siembra” nos ofrece…

¿André al principio nos ha sorprendido tu imagen, no podemos dejar de interesarnos por tu edad?

Tengo 19 años aunque me dicen que aparento menos. Empecé con la práctica de la música andina a los 13 años en Baños –Tungurahaua, mi ciudad natal.

¿A tan corta edad con cuántos grupos musicales has participado?

Como te he comentado, mis inicios musicales comenzaron en mi ciudad natal. Tuve la oportunidad de formar varios grupos en el colegio y me fui formando dentro de los instrumentos andinos de viento que son mi pasión. Luego por motivos familiares nos desplazamos a la ciudad de Quito donde con mi hermano Alex formamos nuestra primera agrupación, a la misma que llamamos “Huayra”, y cuya característica era que utilizábamos solo instrumentos de viento como las zampoñas, las quenas, los rondadores y la flauta de pan.

¿Cuándo se da la oportunidad de proyectar su música fuera del país?

Mi hermano llevaba varios años viajando por Europa con un proyecto musical andino llamado “Tupari”, siempre me ofreció la oportunidad de formar parte de esta agrupación, pero hace 2 años, cuando terminé el colegio en Ecuador, fue cuando me plantee venir a Europa.

¿En esta aventura musical, cuántos países has visitado?

Yo llevo compartiendo este proyecto musical por casi un año y medio, y en tan corto tiempo he podido visitar y conocer varios países como Italia, Francia y Portugal, siempre saliendo y regresando a España que es el país en donde residimos. Hemos participado en varios festivales internacionales y también hemos ofrecido nuestra música en calles y plazas donde es la mejor manera de conocer a la gente de un país y de hacer amigos. Personalmente me he planteado compartir mi actividad musical con los estudios y es por eso que he decidido volver el próximo año a Ecuador, pero regresar a Europa los meses de verano, ya que es en junio, julio y agosto cuando se incrementa nuestra actividad musical.

Te conocimos a través del proyecto cultural ”Siembra”, cuéntanos sobre ello.

Siembra es un proyecto cultural en el que hemos puesto mucha ilusión y mucho esfuerzo. En primer lugar te diré que seguimos llamándonos Tupari y que Siembra es un proyecto paralelo. Siembra nació con la proyección de hermanar a los pueblos musicalmente y es así como hemos formado una pequeña escuela para el aprendizaje de instrumentos andinos. Inicialmente empezamos solos y con pocos integrantes, pero paulatinamente hemos logrado interesar a más personas para formar parte de nuestro proyecto. Hoy ya hemos conseguido que la oficina cultural de la ciudad nos ceda un lugar donde tener nuestra sede y donde podamos compartir las clases musicales.

Nos comentabas que pronto realizarán su primera grabación, que interesante…

Si, y ha sido muy gratificante ver como los niños y los jóvenes que asisten a las clases han ido aprendiendo y se han ido esforzando de tal manera que les hacía mucha ilusión ver su trabajo plasmado en un CD. Hemos seleccionado a tres grupos según sus edades que van desde los 10 a los 20 años y hemos escogido varios de los temas para grabarlas en estudio. Todo esto contando con el auspicio del departamento de cultura del municipio de Figueres.

¿Desde el otro lado del mundo, cuanto se extraña la tierra natal?

Demasiado, cada día siempre existe más de un pensamiento hacia nuestro querido Ecuador. Realmente yo aún llevo poco tiempo fuera de mi país y es más volveré pronto a él, pero el resto de mis compañeros, incluído mi hermano, ya llevan más de 5 o 6 años fuera de nuestra querida patria. Realmente la falta de tu país se nota de una manera más profunda aún cuando visitas lugares donde no hablan tu idioma y donde comparten otras culturas, en ellos siempre serás un extranjero, por más que quieras integrarte tu país de orígen siempre está latente en tu corazón.

¿Tu familia está contenta de que hayas descubierto en la música tu afición?

Pienso que si ya que mi abuelo y mis tíos ya entonaban instrumentos musicales, ellos se inclinaban por la música nacional y la interpretaban con guitarras y requintos. Fue a raíz de que conocimos la música andina cuando mi hermano Alex junto conmigo nos interesamos por aprender los distintos instrumentos de viento. Yo me he inclinado más por los instrumentos de caña como la flauta de pan, las zampoñas y la quena y mi hermano además toca el charango y la guitarra. Te cuento que mi familia siempre vio con agrado mi inclinación musical ya que siempre les supe manifestar mi deseo de no dejar de lado mis estudios, por cierto, quisiera especializarme en la educación musical.

André ya casi terminando, háblanos de tus proyectos futuros…

Como te he contado estamos muy felices de compartir nuestra afición con la gente local a partir del proyecto musical Siembra y es ahora mismo donde mantenemos nuestra ocupada atención. Además seguimos tocando y grabando junto a Tupari, nuestro grupo principal desde el inicio de nuestra aventura musical en Europa. Con Tupari hemos grabado 2 cd´s, el primero dedicado a la música andina tradicional y el segundo dedicado completamente a la música ecuatoriana.

André muchísimas gracias por tu tiempo y muchos éxitos…

Gracias a ti por preocuparte por nuestra actividad y nuestra música….