Fue una verdadera fiesta la que se sintió el miércoles 21 de junio de 2017 en la noche que se enfrentaron los equipos de Liga Deportiva Universitaria de Quito y Barcelona Sporting Club del puerto principal, obteniendo un marcador equilibrado para ambos equipos en el ahora llamado estadio Rodrigo Paz Delgado. La décimo sexta jornada futbolera del Ecuador, que fue aplazada por otros motivos deportivos  nacionales e internacionales, se enfrentaron dos equipos entregados a buscar el mejor resultado para su plantilla, y satisfacer a su hinchada que desde días anteriores ya buscaban su entrada para alentar a su equipo.

La contienda deportiva era trascendental para ambos equipos, para Barcelona significaría el primer triunfo luego de 20 años sin ganar en Ponciano y además igualaría la posición del ídolo de Manta, El Delfín, quien ostenta la primera posición en esta primera etapa del rey de los deportes.

Los equipos habían puesto su pie en el terreno de juego con una fanaticada que llenó los graderíos, siendo los primeros minutos de mucha entrega con sus jugadores claves para este evento y para Barcelona que tenía mucha posibilidad de llevarse una victoria. Ya a los seis minutos Liga mantenía su juego atrás, lo que le iba impedir obtener un resultado y una falta haría que un tiro libre seria aprovechado para la opción de gol que se daría el minuto 10 por parte del jugador argentino nacionalizado, Damián  “el kitu” Díaz, a solo 33 metros de la portería.

Con aquel gol Barcelona estaba encaminado a romper el invicto y seguir con el mismo ritmo para obtener un resultado aún más favorable. Según datos estadísticos, son 45 partidos jugados entre estos dos equipos, los cuales en 30 ocasiones ha ganado LDU, y en otros 15 encuentros han empatado, por lo cual es una enorme diferencia que Liga ha mantenido con un juego dominador.

Y serian cuatro minutos después del primer gol para que la alegría de victoria de Barcelona se vea frustrada por una anotación de José Francisco Cevallos que marcaría el empate al encuentro, convirtiéndose en un duelo de estrategias para ambos directores técnicos para el resto del cotejo.

Durante el partido iban apareciendo falencias de los jugadores de ambos equipos que terminaban en amonestaciones por parte del árbitro central, lo cual no dejaba de tener sus momentos de emoción para el público y definir un ganador del encuentro. El equipo visitante tomó la iniciativa en sus jugadas estratégicas, pero luego hubo un Barcelona que no supo mantener el ritmo por lo que su elenco hizo un desgaste físico, con lo cual Liga no tenía impedimentos para intentar hacer suyo el juego.

El empate dejaría un encuentro número 46, con un Barcelona goleador en esta etapa queriendo alcanzar la primera posición en la tabla del campeonato nacional, y una Liga con una crisis en su posición, siendo penúltimo con un solo partido ganado.