Son  pocos las personas que piensan equivocadamente que este arte es de origen panameño, pero los apasionados que conocen de esta moda, saben que este sombrero fino y artesanal proviene del Ecuador, el cual es producido por las manos hábiles de ingeniosos artesanos oriundos de Pile.

Pile es una pequeña población de aproximadamente de 1000 habitantes, ubicada en la provincia de Manabí,  donde las calle aún son de tierra y la señal telefónica solo es receptada cuando se espera frente a la puerta de la iglesia, pero es en este lugar donde crece la famosa paja toquilla, la principal materia prima para la elaboración de los sombreros, que desde los inicios del siglo XX se cultiva, cosecha y se realiza productos elaborados de la paja toquilla, para el país y el mundo.

Diógenes y Francisco Pilligua, son pobladores de Pile que no dudan ni por un instante de que el mejor sombrero del mundo nació precisamente aquí, en este rincón manabita llamado Pile, Diógenes de manera firme y orgullosa, manifiestas lo siguiente: “nosotros somos los que hacemos los sombreros, y ellos son los que se llevan la fama” , esta afirmación es muy cierta, ya que por las cualidades estéticas y únicas que este famoso sombrero posee, sale a exhibirse en Panamá y luego al mundo, el cual es muy apetecido no solo por la gente común, sino por las personas de farándula y de fama mundial.

Esta labor esta pronosticada a extinguirse, porque los productos de elaboración artesanal se ven amenazados por la industrialización del mercado. Para muchos artesanos ya no es atractivo recibir un valor mensual inferior al salario mínimo vital, por sus trabajos que son de muchísima labor y tiempo en su elaboración.

En la actualidad se han desarrollado programas y  fundaciones que tienen como objetivo principal mantener el oficio de los tejedores de sombreros, en estas fundaciones y escuelas tratan de ocuparse de la salud de los artesanos, de mantener sus ingresos económicos equilibrados y sobre todo de motivar a que los conocimiento de su elaboración sean transmitidos a las generaciones venideras, es así que Cristian Alejandro un niño de 12 años asiste todas las tardes a una de las escuelas de tejedores del sector quien dice “Le tome amor a tejer sombreros como, teje mi papa”.

El futuro de estos finos sombreros ecuatorianos,  ahora dependerá mucho de estas escuelas y fundaciones que continúen motivando a los pobladores de las localidades para que se trasmita esta forma de vida y conocimiento, que se detiene en el tiempo y que es la imagen de nuestro país al mundo.

La confección de estos finísimos sombreros tienen tanta fama y misterio que existe incluso libros escritos de la labor de estos artesanos Manabitas, como es el libro de viajes “THE PANAMA HAT TRAIL” donde su autor  indica que no existe apoyo gubernamental para su promoción en el mundo como un producto de calidad.

FICHA DE INFORMACION

EL FAMOSO SOMBRERO PANAMEÑO, no es más que un nombre que se le puso a un singular sombrero único en el mundo por su detalle, por su calidad, por su acabado y que en realidad ese sombrero es propio en su elaboración como en la obtención de su materia prima “100% ecuatoriano”.

COSTO EN EE.UU 

Cada sombrero puede tener un valor de hasta $ 20.000US.

PROCEDENCIA

Litoral ecuatoriano, Prov. Manabí, comunidad de Pile.

PRODUCCION

Se puede producir entre 3 a 4 sombreros al año.

MATERIA PRIMA

Paja toquilla y materiales 100% ecuatorianos

MERCADO

Estos sombreros son vendidos en almacenes de los EE.UU.