Los Sanjunes de Caranqui, una tradición centenaria

Para conocer un poco más las costumbres antiguas de nuestro querido Ecuador, nos enfocamos ahora en sus fiestas populares.

En la parroquia de Caranqui en el Cantón Ibarra, se celebra a mediados de julio las fiestas de San Juan, que originalmente es el 24 de junio y se festeja en Olmedo en el Cantón Cayambe. Esta tradición se ha propagado hacia Imbabura.

Con trajes típicos, máscaras, licor y con ganas de bailar por 12 horas, las personas residentes de Caranqui, danzan durante 3 días seguidos al sur de Ibarra en la denominada ‘Cuna de Atahualpa’, la que alberga a propios y extraños.

Darío Robalino nos cuenta que esta tradición data de mucho más de 100 años atrás y que al principio los participantes eran únicamente hombres, así algunas personas tenían que disfrazarse de mujeres para conformar las parejas.

La vestimenta es muy curiosa, utilizan un zamarro que es un pantalón de piel de cordero (debido a esto es muy pesado), una careta con forma humana, sin dejar de lado el sombrero y un pañuelo en el cuello, para no perder la elegancia, puesto que es una fiesta de respeto.

Diego Martínez habitual participante, nos cuenta que su afición llegó desde muy pequeño, gracias a su tío que le llevó a ver un día y se contagió de la alegría y las pegajosas canciones que la banda toca casi sin interrupción. “Mi papá tuvo que ingeniárselas porque en ese tiempo era muy difícil conseguir zamarros para niños” expresó Martínez antes de comenzar las coreografías.

Los ‘chivos’ son las personas que bailan al mando de ‘el chivo mayor’ que tiene un látigo de cuero denominado cabresto, golpeando al suelo cerca de las personas dirige el baile, que se le conoce como mudanzas y luego al finalizar se hace una danza general con todo el público.

Al mismo tiempo se celebra según el Calendario Andino la fiesta del Inti Raymi, que es la fiesta del sol, pero en esta zona se prefieren los Sanjuanes. Aquí no se ven las caras y es prohibido hablar, para guardar el anonimato de los danzantes, además de permitirles ingerir licor mientras dura el baile.

En la fiesta a San Juan, se puede encontrar tres tipos de participantes: Los sanjuanes que tienen caretas y con sus trajes completos, sea hombre o mujer. La segunda son otro tipo de personas que recorre las calles tocando instrumentos musicales como: la flauta de carrizo, la guitarra y el rondín. Por último se encuentran personas sin ninguna máscara ni trajes, son personas mestizas que se encargan de los juegos pirotécnicos.

La banda, se encarga de hacer bailar a los asistentes por un tiempo estimado de 30 minutos cada canción y cuando se termina la canción es muy común escuchar gritos de los sanjuanes diciendo “banda”, “chabajá”, hay” entre otros sonidos que salen de sus gargantas.

Para el alcalde de Ibarra Álvaro Castillo, el baile de los sanjuanes ya es una tradición del pueblo ibarreño, en especial de Caranqui, admite que hay que trabajar mucho todavía en la cuestión de la comercialización de licor y de la violencia que se genera en altas horas de la noche, pero que de a poco se va a ir subsanando estos problemas. Igualmente hace una invitación a la gente de afuera a vivir en persona estas fiestas cada julio a mitad del mes.

Igualmente Martínez, asegura que son tres días de fiesta familiar, se vende comida típica y existen juegos para los niños de la casa. Imbabura tiene muchas atracciones turísticas que puede visitar, dentro de ellas, al visitar las danzas de los sanjuanes no solo se puede ‘zapatear’ con alegría, también se puede conocer las raíces del pueblo caranqueño, pueblo ancestral de tribus guerreras.

Escrito por: 
Guillermo Carranco